Homenaje a mis colegas.
Yo tengo tanto temor como tú de que a mí se me apague la luz.
Cuando me pidieron que escribiera un homenaje a mis colegas no sabía cómo iniciar, así que me senté en el estudio y vino a mi mente todo lo que les he leído en las redes sociales y grupos de chat, y es así como inicio…
Aquí vamos otra vez… tantos planes que teníamos, tanta prisa por vivir, siempre corriendo, queriendo ganar la batalla al tiempo, y ahora inmersas/os en esta gran prueba de valor de arriesgar nuestras vidas y con la incógnita de si veremos un amanecer otra vez.
Nosotras/os al graduarnos de médicos hacemos un juramento hipocrático y hoy considero que no solo los médicos somos fieles a esto, si no todas/os los que hacen que un hospital gire las 24 horas. Hoy todas/os deben ser homenajeadas/os.
Videos de médicos en todo el mundo rezando para que DIOS nos ayude a continuar, que nos dé fuerzas para quitar las frustraciones de luchar contra un enemigo que hoy no conocemos y no sabemos cómo derrotar, y por supuesto invadidos del temor de ser contagiados.
Hoy, la vida nos enseña lo vulnerable que somos, que no importa más un jugador de futbol que gana los millones, y qué ironía los estadios cerrados y un mundo consumista paralizado, nosotras/os los profesionales de la salud, cuando estamos en formación ganamos un sueldo mezquino, y aun siendo médicos especialistas nos vemos obligados a trabajar en dos o hasta tres instituciones con eternas jornadas poco remuneradas.
No es la primera vez que sucede algo similar, recordemos otras pandemias históricas, la vida está pidiendo a gritos que aprendamos la lección y es tan buena maestra que nos precisa a repetirla.
Esto no es coincidencia. El que un virus microscópico ponga al mundo de rodillas cuando nos sentíamos gigantes, y hasta ahora nos demos cuenta que es más importante el profesional de la salud atendiendo catástrofes, que no importa cuánto dinero tengas o quién seas, o qué coche manejas, si eres creyente o no, lo que importa es la fe y esperanza para continuar desde nuestra trinchera, hoy vemos que cada día de nuestra cuarentena los recursos naturales se recuperaron de manera increíble, que debemos estar unidos como familia y sociedad, abrazarnos más fuerte y disfrutar cada minuto. ¡Vaya lección de humildad nos da este desconocido enemigo!
No me queda más que decir gracias por su ardua labor a todos mis amigos/as médicos, técnicos, enfermeras, administrativos, nutriólogos, a los magos de mantenimiento, farmacéuticos, en fin, todas aquellas almas que día a día hacen su mayor esfuerzo para que los hospitales y centros de salud funcionen estratégicamente, mientras todos los demás se quedan en casa. Tú ayudas dejando de lado a toda tu familia, incluso hasta a ti mismo. Gracias por la entrega, gracias por darnos vida y continuar de pie hasta cuando sientes que ya no puedes más y entonces te invade el miedo y la angustia de qué es lo que va a pasar, si vamos a ganar la batalla o quién la perderá. Gracias por continuar y cada día ponerse sus trajes de héroes y heroínas, hacer honor a aquel juramento que dijimos llenos de alegría y emoción. Segura estoy que esto pasará y estaremos llenos de aprendizaje, anécdotas y momentos vividos en esta siniestra película, pero diciendo: Una vez más… aquí vamos otra vez.
Colaboradora:
Dra. Paulina Montaño Ascencio | Directora General HR Radiólogos